Una cinta sumamente graciosa y divertida que demuestra el talento de Amy Schumer al frente y detrás de cámaras con un guión que presenta detalles que parecen salidos de una rutina cómica y funcionan bien.
Desde pequeña, Amy ha oído a su padre decir que la monogamia no es un estado realista. La periodista vive de acuerdo con las creencias de su padre, disfrutando de una vida sin ataduras, libre de aburridas promesas románticas. Sin embargo, ha llegado a un punto muerto. Cuando descubre que se está enamorando del hombre al que dedica un artículo, un encantador y exitoso médico deportivo llamado Aaron Conners, Amy se replantea sus creencias y su estilo de vida.
Amy no es el tipico personaje de comedias románticas que cree en el principe azul, pero el acierto es que tampoco es una versión femenina de un personaje masculino como a veces sucede, tanto en comedias subidas de tono como en las heroinas de acción, es un personaje complejo, deshinibido pero dispuesto a un cambio que no parece mágico sino muy orgánico.
El dilema es que Amy no cree en la monogamia asi que evita enamorarse hasta que el momento llega y es inevitable. Suena como la misma formula para estos filmes y en cierta parte lo es, sin embargo demuestra que aún con esos ingredientes hay diferentes formas de refrescar una historia como estas.
Los personajes están muy bien logrados y las actuaciones al nivel, ciertamente parece un vehiculo para Schumer y lo valida con su tono desenfadado, fresco, critico y analista tanto de las relaciones personales, sexuales, familiares, con un atino para la comedia.
El guión presenta algunas fallas, momentos débiles, pero en la mayoría de los casos pasan casi desapercibidos por el carisma del personaje y el trabajo en equipo de los actores que mantienen la atención del espectador. Algunas frases y detalles parecen parte de una rutina de stand up y quiza ese era su fin alguna vez, pero terminaron cayendo en el guión de la cinta, lo cual funciona para provocar risas e incluso carcajadas.
Aún cuando muchas de las alusiones personales o sexuales están subidas de tono, suenan graciosas sin ser agresivas, otro detalle diferente a otras cintas donde parece que buscan las risas nerviosas impactando al espectador o incomodandolo.
Y la protagonista tiene un crecimiento gradual que no solo parte de estar enamorada, sino de lo que le rodea, personal, familiar y laboralmente, por lo cual no se siente mágico sino realista hasta cierto punto.
Amy demuestra su talento en la comedia, en mancuerna con Judd Apatow, y entrega un filme gracioso, entretenido y un poco romántico para los que esperan el resultado de esta formula. Muy recomendable.
Calificación: 85 puntos.
Comentarios