Un filme sencillo, una fabula deportiva que da mayor peso al positivismo y no presentan dilemas complejos, volviendola una experiencia linda, agradable y placentera aunque poco memorable
Detalla las inspiradoras hazañas de Michael Edwards, mejor conocido como “Eddie el Águila”, el más famoso saltador de esquí en la historia británica. El retrato de la película del enfoque hacia el deporte de Edwards de nunca rendirse festeja el espíritu humano y la resiliencia de cara a probabilidades y desafíos extraordinarios.
La historia a pesar de ser un caso de la vida real, adopta formulas básicas en este tipo de cintas, asi que parece tomar cuidadosamente aquellos momentos claves en la vida de Eddie The Eagle sin ahondar mucho en las problemáticas que debieron existir más allá de su limitado talento para el deporte. El balance recae mas bien en el empeño que pone, esto no es negativo cuando el motivo de la cinta es levantar los ánimos. En ese sentido la pelicula hace bien su trabajo y cumple lo que promete.
Y es que desde la música hasta la atmósfera que rodea el relato van llevando al espectador a momentos lindos, donde hasta el más gruñon terminará por esbozar una sonrisa. Parte de este resultado viene de la buena elección del casting, Taron Egerton hace un buen papel y nos otorga un personaje que provoca empatía sin problema como el espectador desde el primer momento. Hugh Jackman sirve como contraste por su personalidad rebelde y su crecimiento en la cinta.
La pelicula tiene un tono uniforme y tan esperanzador todo el tiempo que cuando llegan los dilemas que aparentan ser graves, es imposible no pensar que saldrá airoso, ya que desde el comienzo los pequeños obstáculos son logrados, algunos tan solo con un esfuerzo menor. Por ello quedará en el rincon del género al paso de los años, los personajes no se transformar diametralmente o los dilemas no son tan impactantes como para dejar huella en el espectador, aunque la sonrisa que deja al final se agradece de todas maneras.
La contraparte en estas cintas viene con aquellos que nunca creyeron en estas estrellas del deporte antes de llegar a la cima, en este caso algunos de esos personajes están a punto de rayar en villanos de telenovela pero terminan por detenerse justo antes de cruzar esa línea.
Un filme para hacerte sentir bien, sin acudir al chantaje emocional pero si a cada una de las formulas del genero, te levantará el ánimo aunque quizá la olvidarás sin problema en poco tiempo.
Calificación: 70 puntos
Por Luis
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