La cinta presenta una narrativa ágil con personajes empáticos aunque la historia es predecible, el tono no es uniforme y el asunto del autismo de nuevo se exagera desproporcionadamente.
Christian Wolff es un contable y genio matemático, un hombre extremadamente tranquilo, obsesivo con el orden y con mucha más afinidad con los números que con las personas, que lleva una doble vida como asesino despiadado.
Antes que nada comenzaré por plantear algunos elementos positivos de la cinta, como la narrativa ágil que nos hace olvidarnos que esa historia en su centro ya la vimos innumerables veces. Ben Affleck hace un trabajo decente a pesar del personaje al que se enfrenta, pero es Anna Kendrick quien resalta aun más, y esto tanto como beneficio resulta una falla.
Como thriller hace un buen trabajo, las escenas están llenas de energía, la trama tiene algunas sorpresas, no muchas en realidad, pero el viaje no se hace tedioso por el ritmo y el trabajo de los actores en los personajes de la periferia.
Entre lo negativo es que algunos puntos clave de la trama son demasiado predecibles, como el asunto de los hermanos, o el verdadero villano, ambos son bastante obvios desde el primer momento. Y si bien Ben Affleck hace una actuación decente con el material con el que dispone, el personaje es uno de los mayores problemas. Es cierto que siendo ficción, una película hollywoodense, hay que exagerar más allá del límite, pero en este caso resulta ofensivo. Se trata de un genio de las matemáticas que debido a su autismo parece hacerle perfecto como un asesino, claro, esto después de que su padre lo obliga a entrenar de niño para “defenderse”.
De nuevo vemos acciones exageradas en la conducta de estos personajes, convirtiéndolo en una caricatura insoportable. Y el asunto es que en algun momento de la trama esto se ha vuelto tan denso que no hay otra opción que introducir a la damisela en peligro para equilibrar.
Con ello viene una ruptura en el tono de la cinta, porque la chica provee algunos momentos cálidos al punto de la comedia. Y entonces ¿es un thriller o una comedia?, las sonrisas de Affleck en vez de mostrarse cálidas parece que está a punto de perder el personaje y soltarse a carcajadas.
E incluso lo complicado que resulta para el contador interactuar con la chica es manejado de una manera tan torpe que provoca risas en lugar de empatìa en el espectador, porque claro, que gracioso es ver a alguien hablando de manera tan seca y fría con alguien que pone cara de estar escuchando a un ser extraño.
Quiza el asunto del personaje venga de un punto de vista personal y cada miembro de la audiencia lo tomarà según su experiencia. Sin embargo eso podría pasar casi desapercibido si no fuera por una historia interesante o con sorpresas que te dejen al filo de tu asiento, pero no es el caso.
Un filme entretenido que te mantendrá atento aunque el personaje principal en vez de ser entrañable resulta fuera de balance y la trama es tan predecible como un episodio de show de crímenes en televisión.
Calificación: 60 puntos