Chris Pine y compañía nos transportan por el alucinante mundo de este juego de rol
Este jueves 30 de marzo se estrena Calabozos y Dragones: Honor entre Ladrones cinta inspirada en el juego de rol homónimo, uno de los clásicos más populares entre este tipo de juegos. El elenco cuenta con actores conocidos como Chris Pine (Edgin) Michelle Rodriguez (Holga) Hugh Grant (Forge) y estrellas que han deslumbrado en los últimos años como Regé-Jean Page (Xenk) Sophia Lillis (Doric) y Justice Smith (Simon).
La historia dirigida por John Francis Daley y Jonathan Goldstein nos muestra a un ladrón encantador caído en desgracia que busca retomar el curso de su vida cuando el llamado de la aventura se interpone en su camino. Ahora, Edgin junto a sus viejos amigos e inesperados aliados tendrá que arreglar las consecuencias de aquella misión que marcó su perdición.
Vale comenzar mencionando que el vestuario y maquillaje es increíble, así como el diseño de las locaciones que nos transporta a todo un mundo complejo. A diferencia de, por ejemplo, Quantumanía, la película sabe aprovechar sus fuentes de inspiración y te contagia ese entusiasmo y/o nostalgia por el universo en el que toma lugar esta historia. Las escenas de acción también son interesantes con ciertas tomas y decisiones que dan una perspectiva fresca a lo que ocurre en pantalla.
Ahora bien, la historia es un tanto predecible, algunas cosas se vuelven más que evidentes por la propia caracterización de los personajes, otras se van revelando conforme se nos brinda más información, pero algunas son tan rápidas de deducir que se siente cierta impaciencia porque la historia llegue a ese punto. El tono también es muy cómico, con risas a diestra y siniestra, algunas son divertidas como una subversión de lo honorable y heroico (a fin de cuentas, estamos entre ladrones, no se supone que las cosas suelan resultar) pero le da cierto absurdo a la cinta que quizás algunos encuentren como excesivo.
A final de cuentas, se trata de una aventura entretenida, con risas, acción, aventura y un tono que puede disfrutarse en familia. Una buena opción para pasar un rato agradable, incluso si no eres fanático de los juegos rol o sus distintas adaptaciones, pues no exige demasiado conocimiento de su público y en cambio otorga un equipo con una química divertida.
