Cómo entrenar a tu dragón: DreamWorks se suma a las adaptaciones live action con firmeza

Cómo entrenar a tu dragón cuenta con jóvenes estrellas como Mason Thames y Nico Parker

El próximo 12 de junio se estrena Cómo entrenar a tu dragón el live action de una de las franquicias más entrañables de DreamWorks. En esta adaptación, regresa Dean DeBlois como director y escritor, junto a Cressida Cowell en el guión, ambos han formado parte de la trilogía original desde el comienzo, junto con Gerard Butler, quien ahora le da vida a Estoico en la pantalla.

La historia la conocemos bien: La isla de Berk es un lugar difícil para vivir donde lo poco que prospera debe de enfrentarse a su mayor plaga, los dragones. Grandes vikingos han luchado contra ellos, como su legendario líder Estoico (Gerard Butler) quien espera encontrar su nido pronto. Mientras tanto, su hijo Hipo (Mason Thames) toma la descabellada decisión de cuidar de un Furia Nocturna con quien entabla una poderosa amistad gracias a la cual comienza a destacar y llamar la atención del pueblo, incluida la prometedora Astrid (Nico Parker).

En lo que respecta a la narrativa, esta adaptación es bastante fiel a la animación original, incluyendo algunos de los diálogos más icónicos de la cinta del 2010. En este caso, el equipo buscó mantener el espíritu de esta franquicia, por lo que la cinta tiene cierto aire de nostalgia, permite volver a conectar con este mundo desde un nuevo formato. Quizás la diferencia más importante es la manera en que algunas relaciones toman más relevancia y otras pasan a un plano bastante secundario.

Una de las mayores fortalezas de esta entrega es su fotografía, por parte de Bill Pope, en la cual la iluminación y las tomas nos llevan por un viaje alucinante, la isla de Berk se convierte en una verdadera aventura, sin mencionar la edición en las escenas de vuelo, que llegan a hacer que nos sintamos involucrados como espectadores, o algunos de los momentos clave en que los colores hacen de su parte para resaltar la emotividad en el ambiente.

Los efectos especiales son otro de los puntos que se agradecen, especialmente en lo que respecta a los dragones. Algunos sufrieron más cambios, apostando por un punto medio entre la caricatura y la animación, excepto por Chimuelo, con quien buscaron conservar el diseño que es querido por los fanáticos, pero con los terminados necesarios para integrarlo en escenas con actores reales y ciertamente el resultado luce bastante bien en pantalla.

En cuanto a los actores, aunque en algunos casos el cambio de imagen puede ser chocante al inicio, el talento de los jóvenes es innegable. Parker ha estado presente en varias producciones los últimos años y aquí nos recuerda por qué; Thames no sólo tiene un atinado parecido con Hipo, también lleva el peso dramático de la historia como protagonista. Por su parte, Nick Frost hace una interpretación bastante atinada de Bocón. Julian Dennison, Gabriel Howell, Bronwyn James y Harry Trevaldwyn funcionan más como un alivio cómico, con momentos en los que resaltan hacia el último acto.

En general, una cinta divertida que cuida mucho de estar a la altura del material original y, aunque su historia se mantiene igual, busca proponer desde su apartado visual y artístico, así como con la inclusión de varios actores jóvenes con carreras prometedoras que se involucran completamente con sus personajes y nos brindan un momento disfrutable. En general, un producto bien ejecutado para revivir el gusto por esta querida franquicia.