Pronto llega a la cartelera "Tolkien" dirigida por Dome Karukoski que narra la vida del famoso escritor.
Para tomar a Tolkien de las páginas de la historia y darle una vida tangible y moderna, los realizadores requerirían de dos actores distintos y ambos necesitaban ser capaces de dejar que la audiencia pudiera ver el interior de los engranajes de la imaginación de Tolkien. La búsqueda para el Tolkien adulto los llevó a uno de los actores más prometedores de los últimos años: Nicholas Hoult.
De inmediato, Karukoski vio algo en Hoult del Tolkien que había leído. “La primera cosa que me intrigó de Nicholas fue su inteligencia”, explica Karukoski. “Es muy inteligente, que necesitas ser para interpretar a un genio como Tolkien. La segunda cosa es que es muy juguetón, también un atributo de Tolkien, ¡de quien se sabía se disfrazaba de caballero y salía a espantar a gente en Oxford! Nick encarnó eso a cabalidad. Pasó meses preparándose, incluso practicando cómo dibujar a la manera de Tolkien, mientras se sentaba a que le aplicaran el maquillaje en X-MEN. Finalmente, Nick es un actor que está dispuesto a hacer las tomas que sean, en las que le apuesta a algo distinto cada vez. Nunca deja de buscar qué sería mejor para la escena”.
Aunque ya estaba impresionado con Tolkien desde sus incursiones infantiles en la Tierra Media, Hoult dice que fue Karukoski quien lo tentó con su interés para ahondar tanto en la imaginación de Tolkien como en las partes desconocidas de su vida. “La pasión de Dome lo hizo un tipo fantástico para contar esta historia de perseverancia y de cómo encontrar tu voz. Creo que nunca he conocido a nadie con una personalidad tan intensa e indómita como la de Dome”, reflexiona Hoult. “Para mí fue un gran honor interpretar a Tolkien de una manera que nadie ha visto”.
Hoult se metió de lleno en la investigación, al leer todo lo que pudiera encontrar acerca de Tolkien, pero también buscando maneras para adueñarse del papel. “Leí todas las biografías, escuché las grabaciones de Tolkien más tarde en su vida y vi todas sus fotografías”, comenta Hoult. “Y entre más sabes de Tolkien, más te sorprenden todos sus logros e ideas. No obstante, como actor tienes que reconciliarte con el hecho que cuando interpretas a una persona real, sólo puedes interpretar un tipo de fantasma de ellos. No te puedes hacer pasar por ellos, así que intentas captar algo de su esencia viviente”.
Una gran parte de esa esencia para Hoult fue la lealtad de Tolkien hacia los chicos de la TCBS, que se convirtió en un tipo de familia creada por sí sola cuando más necesitaba una. “Tolkien se sintió muy conectado con los miembros de la TCBS porque todos eran igual de creativos, fuera en poesía, música o pintura, y también compartían una especie de amor irreverente por las travesuras. Fueron el tipo de amigos capaces de impulsarse y alentarse entre ellos para ir todavía más lejos. Y en aquella época, Tolkien no tenía a nadie más así”, expresa Hoult.
Esa es también la razón por la cual el mantra de la TCBS de Helheimr tenía tanto poder para Tolkien. Para Hoult, Helheimr también se volvió una inspiración de la tenacidad y negativa de Tolkien a perder la esperanza de lo que él y Edith habían logrado juntos. Hoult acota, “Creo que Tolkien vio en Edith a una sobreviviente fuerte como él. Pero también me parece que los dos se divertían mucho como un par de locos. Su relación sólo se volvió más emocionante porque tenían que verse a escondidas y pasar por muchas cosas para estar juntos”.
Mientras que Hoult interpreta a Tolkien en su adultez joven, es el actor neófito Harry Gilby quien interpreta a Tolkien de niño. Karukoski dice de Gilby: “Cuando vi por primera vez a Harry quedé impactado con el hecho de que es casi tan alto como Nick y se ve, e incluso camina, como Nick. También contaba con esta sensación de inocencia pura que sentí que capturaba algo acerca de Tolkien cuando tenía esa edad. Sentí que sacaba a relucir ese atributo juguetón y pueril que Tolkien siempre mantuvo vivo en su interior”.