Un guion inteligente con una trama impredecible de principio a fin, horror y humor negro en este caso extraordinario.
Durante la noche de su boda, una mujer recibe la invitación por parte de la rica y excéntrica familia de su marido para participar en una tradición ancestral que se convierte en un juego letal de superviviencia.
Es una de esas raras ocasiones en que nos llega una cinta divertida y hasta cierto punto original, una historia para desconectarnos, reírnos, sorprendernos y esperar lo inesperado, si bien parezca superficial y tenga algunas fallas en su desarrollo, es una de las piezas en la cartelera más satisfactorias.
Si te gusta el terror es una buena apuesta, no está lleno de gore pero si tiene una buena dosis, tiene un balance entre momentos gráficos y otros sugeridos, estos últimos parecen seleccionados de acuerdo al actor que sufre dicha tragedia. Si te gusta el humor negro, este es un regalo perfecto, porque hay escenas memorables, hay risas desenfadadas que equilibran la violencia de algunos de esos momentos como los destellos melodramáticos de otros.
Desde el primer momento en que se presentan los personajes se nota el tono caricaturesco que los definirá en la mayoría de los casos, pero tal como el juego de escondidas y la maldición que suponen sobre la familia, es parte de la tonalidad del filme y si desde el comienzo la aceptas, estás por disfrutar de un viaje placentero.
Uno de los puntos fuertes en dichos personajes es que algunos parecen tener dobles intenciones, no sabemos si quieren deshacerse de la novia o quieren ayudarla, asi que existe algo de tensión para lograr momentos divertidos.
Samara Weaving como la novia en peligro en esta cacería hace un trabajo formidable, desde el shock de conocer su destino hasta decidir hacerle frente a esta familia desquiciada y asesina. Y es que la familia jugará a las escondidas en donde si encuentran a la chica la matarán, asi que tiene dos opciones, el esconderse hasta la madrugada o hacerles frente. Y en este juego del gato y el ratón la trama se vuelve más divertida cuando de repente no sabemos si cederá, se rendirá o si sus esfuerzos serán recompensados.
Y entre toda esa sangre hay una critica social, enfocada al estado mental de la gente millonaria, similar a cintas como "Huye" o "The Purge" en donde aquellos con poder económico juegan sin repercusiones con aquellos menos afortunados como si fuesen sus juguetes personales.
En la mayoría de estas cintas el acto final es el más importante para dejar un sabor memorable en el espectador y muchas veces termina por decepcionar, aquí no pasará, porque las sorpresas existen hasta el último momento. Al final no te quedará tanto la sensación del horror y la sangre casi a borbotones sino esa satisfacción de haber invertido bien tu tiempo en una cinta entretenida que cumple con creces.
Una de las cintas más divertidas del año, una propuesta entre arriesgada con su trama pero segura en el gusto de los amantes del género que no tienen nada que perder. Completamente recomendable.
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