Blanca Nieves, la esperada cinta de Disney finalmente llega a la pantalla grande

Buscando actualizar la película animada para audiencias casi noventa años después del lanzamiento de la original, Blanca Nieves llega a cines.

Dirigida por Marc Webb (500 Days of Summer) y escrita por Erin Cressida Wilson (The Girl on the Train), Blanca Nieves es el remake en acción real más reciente que Disney nos presenta. La premisa general se mantiene bastante intacta, la reina malvada (Gal Gadot) está celosa de la belleza de Blanca Nieves (Rachel Zegler) y busca eliminarla. La princesa busca refugio con un grupo de siete enanos y eventualmente cae en un sueño profundo a causa de una manzana envenenada, del que solo puede despertar con un beso de amor verdadero. Hasta ahí no hay sorpresas.

No obstante el guion busca darle un mayor desarrollo a todos los personajes y se benefician de ello. En esta ocasión vemos más de Blanca Nieves aprendiendo de sus padres al crecer, vemos interacciones con su interés amoroso, que en esta versión no es un príncipe, y cómo se desarrolla su relación de manera más orgánica que en la película animada. También conocemos un poco mejor a los enanitos y vemos la llegada de la reina malvada, entre otros detalles, que aunque pequeños hacen sentir más cohesiva la historia.

El diseño de producción brilla a lo largo de toda la película. Los vestuarios y escenarios cuidan mucho sus detalles y lucen bastante; los efectos visuales no se quedan atrás y levantan el aspecto visual de la película, no te dejan olvidar que estás en un mundo de fantasía.

Otro elemento que funciona muy bien son las canciones. A pesar de perder temas icónicos como "Un Día Mi Príncipe Vendrá" o "Deseo", las canciones nuevas que los compositores Pasek & Paul (La La Land, the Greatest Showman) crearon para la película complementan la trama perfectamente y nos adentran en los personajes.

Sin embargo la participación de Gal Gadot como la reina malvada deja qué desear en más de una escena, y el diseño de los enanitos es cuestionable por decir lo menos. Otro aspecto que en lo personal distraía bastante era el peinado tan poco estético de Blanca Nieves, que si bien no aporta o quita nada a la trama, me hizo dudar ¿por qué el departamento de peinado le tuvo tanto odio a su protagonista?

A pesar de sus defectos, los aspectos positivos de la película logran superar todas esas fallas para entregar una película entretenida que captura la magia de Disney y honrar a la princesa que inició todo. Con un mensaje positivo sobre bondad y belleza interior, esta cinta representa un live action ideal para ver en familia y disfrutar de un espectáculo bonito aunque formulístico dada su naturaleza de cuento de hada. Para los fans de Blanca Nieves o quienes tienen muy presente la película original hay más de una sorpresa agradable que te deja con un buen sabor de boca.