Mantener estos espacios limpios resulta benéfico tanto para tu salud como la del gato.
Los gatos son animales muy quisquillosos en cuanto a la limpieza, pero también es cierto que tienen la habilidad de escabullirse en rincones bastante remotos de la casa. En especial los gatos con acceso al exterior, suelen esconderse en toda clase de espacios, incluso dentro de carros y electrodomésticos.
Si bien ellos mismos se encargan de la suciedad lamiéndose o restregándose; algunas partículas pueden quedar en sus juguetes, especialmente en el caso de los trepadores (también conocidos como árboles o castillos) donde el felino pasa una parte considerable de su tiempo.
A diferencia de los juguetes comunes, se tratan de una estructura elaborada principalmente con materiales rugosos y otros aditivos como cuerdas y peluche que pueden deteriorarse con el uso excesivo de agua. Por ello, es importante considerar métodos alternativos para su limpieza.
En primer lugar, puedes utilizar el cepillo del gato (o un cepillo de ropa) para eliminar pelos y polvo. Posteriormente puedes pasar la aspiradora para eliminar algún residuo sólido que puede quedar atrapado.
Adicionalmente, existen distintas soluciones caseras que pueden emplearse utilizando un atomizador y un trapo seco. Lo importante en estos casos es uno utilizar jabones con olores fuertes y evitar ante todo el cloro y cualquier producto con amoniaco.
Algunas mezclas seguras son agua con bicarbonato o agua y vinagre. Recuerda rociar sin empapar. Una vez que esté seco, tu compañero puede volver a la cima de su querido árbol.