Tim Burton juega a la segura y entrega una encantadora versión de esta historia, sencilla, directa y con el pequeño elefante que roba el corazón desde el primer momento.
Holt Farrier cuenta con la ayuda de sus hijos Milly y Joe para cuidar a un elefante recién nacido cuyas orejas gigantes le hacer ser el hazmerreír en un Circo que no pasa por su mejor momento. La familia circense de Holt incluye además a la señorita Atlantis, Rongo, Pramesh Singh y su sobrino. La grandiosa Catherine y el magnífico Iván. Max Medici dueño del circo, se decepciona al saber sobre las enormes orejas del pequeño paquidermo hasta que descubre que es capaz de volar, llevando al circo de regreso a la prosperidad.
Impulsado con la nostalgia y la anticipación de que nos vuelvan a contar esta historia, el filme ya lleva algo de ventaja y logra encausarlo en un trabajo redondo. Se mantiene firme en complacer a los espectadores, con enfoque en el pequeño animal. En esta versión a diferencia de la animada solo los humanos hablan, por lo que los conflictos entre estos personajes son mayores y acaparan parte de la atención, sin embargo, nunca se resuelven tan eficazmente como con Dumbo.
Eva Green como una acróbata termina por robar la atención incluso de los niños que casi siempre son los reyes en las escenas de este tipo de filmes, sobre todo porque es uno de los pocos personajes en donde el crecimiento se muestra más evidentes y termina siendo una divertida complica del elefante.
Las actuaciones son buenas y sirven de red para enganchar al espectador pero sus historias son difusas y parecen innecesarias cuando en realidad es el destino de Dumbo el que interesa. El ritmo de la cinta es un poco lento en algunos momentos, lo cual se convertirá en un reto para mantener la atención de los niños.
El trabajo visual, como en cualquier otro filme de Burton, es destacado y cuidado, algunos encontrarán detalles en la animación por computadora, que ciertamente al ser una cinta del estudio más poderoso, se exige calidad impecable. El director entrega lo que los fanáticos esperan y la cinta termina siendo un trabajo bien ejecutado y con el potencial de perdurar. Hay algunas alusiones a los personajes animados, como el ratón, los elefantes rosas, entre otros, que quienes aman el filme de antaño agradecerán.
Dumbo se robará el corazón de los asistentes desde el comienzo, si bien los humanos alrededor palidecerán por más melodrama que suceda en sus vidas, pero al final, tal como el show del circo, lo importante es ver a ese elefante volador y eso funciona.
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