El Delta ha sido una parte importante en la vida de Ash y en su saga de aventuras así que un montaje romántico es el perfecto comienzo del episodio. Mientras tanto los asaltantes están ya usando el auto para besuquearse y fumar hierba. Son cinco chicos, tres de ellos salen para dejar a una pareja ponerse calientes, pero la chica descubre el Necromicon y, por supuesto, recita lo que está escrito en una de las paginas así que en breve el Evil Dead la posee, primero su sed por sexo hace que a su novio no se de cuenta. La chava baja lentamente a sus pantalones y por lo que parece le da una mordida muy, muy dolorosa en la entrepierna.
Ash va con Chet, su "socio del crimen" según dice, para preparar el Pink Fuck, una bebida que incluye una alta dosis de ketamina, Kelly es la primera en tomarlo y comienza a alucinar y flotar en segundos. Y la idea es hacer con esa bebida una gran fiesta y aprovechar a que lleguen los chicos ladrones y retomar el auto, claro, suena lógico.
Pero los jóvenes ladrones quizá ya no lleguen, el auto parece cobrar vida tal cual Christine, cortando los dedos de la mano con la puerta a uno y luego destrozándole el torso usando uno de los rines. La otra chica que les acompañaba se queda encerrada y no puede salirse, y el auto acelera para atropellar a los dos restantes, uno que de por si ya está desangrándose por la entrepierna. La chica intenta controlar el auto pero es inútil. De repente parece que se apaga, pero claro que es una trampa.
Mientras tanto en la fiesta Ash ya está amenizando con los jóvenes que van llegando, no es nada sutil para preguntarles si alguien tiene el auto. Pablo y Kelly tienen una pequeña charla amigable.
El auto sigue a Tyler, el tipo de la entrepierna mordida, cuando está a punto de alcanzarlo para atropellarlo la chica pisa el freno y el auto evil dead hace la escena del día, retiene a la conductora con el cinturón de velocidad, salta como a punto de aplastar a Tyler pero justo antes que la llanta lo aplaste se detiene unos segundos…solo para arrancar e ir bajando poco a poco erosionando la cara del tipo, no esperábamos menos.
Ruby está ocupada distrayendo al padre de Ash porque nuestro protagonista no tiene paciencia para ello, perosu paciencia dura poco, el enfrentamiento es inminente, padre e hijo se retan al toro mecánico. Ash dura 15 segundos arriba, el padre dura 21 y no solo eso, sube a Amber y aumentan el nivel, hasta el toro saca humo del esfuerzo. Y entonces salen los trapos sucios, el padre sigue enojado por lo que sucedió en la cabaña, por la muerte de su hija y porque lo dejó abandonado, asi que sale de la fiesta con Amber y rumbo al baño por algo de acción. Pero de repente la mujer voltea, sus ojos cambian ¡es una poseída!. Pero Ash no está muy interesado en ayudar a su padre. Ruby y Kelly están hartas del plan asi que deciden unir esfuerzos.
De regreso con los chicos, el ultimo que quedaba vivo es arrollado por el auto un par de veces, la chava, que resulta es su novia no se puede controlar cuando por fin el chico es atropellado por ultima vez y es envuelto en llamas.
Pablo es la voz de la razón y le dice a Ash que debe ir a salvar a su padre a pesar de su situación, aunque Ash ya está alucinando. Pero está lo suficiente cuerdo para llegar al baño donde su padre está a punto de ser devorado por la poseída, y viene la pelea del episodio. Con sierra en mano primero la parte del torso, ella le avienta un migitorio, y Ash la remata cortándole la cabeza. Por fin su padre dice “mi hijo es un héroe”, pero un chico entra al baño y sale despavorido pensando que Ash los matará a todos.
Y por fin padre e hijo se reconcilian, y justo cuando hasta la música se ha vuelto melancólica y estamos a punto de derramar una lagrima, un auto atropella al padre y la llanta pasa por encima de su cabeza dejándola hecha papilla. Pasa tan rápido.
Otro divertido episodio, con la dosis exacta de gore que esperamos, creatividad y un guión tan agil que siempre nos deja con ganas de más, aunque satisfechos, tercer episodio y sigue la buena calidad en efectos e historia.